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Sabbath Bible Lessons

“En sus bocas no fue hallada mentira”

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Lección 5 Sábado, 3 de noviembre de 2007

Cristo, el Mayor Maestro

“Gran multitud del pueblo le oía [a Jesús] de buena gana” (Marcos 12:37).

“Jesús fue el Maestro más singular que el mundo jamás conociera. Presentaba la verdad mediante declaraciones claras y convincentes, y las ilustraciones que utilizaba eran de un carácter puro y elevado.” –Exaltad a Jesús, pág. 175

Lectura adicional:   Fundamentals of Christian Education, págs. 236–241. 
  El Deseado de Todas las Gentes, págs. 140–149, 220. 

Domingo 28 de octubre

1. MÉTODOS DE ENSEÑANZA DE CRISTO

a. Considérese el método de enseñanza que Cristo usó en el Sermón del Monte. Mateo 5:1–12.

“El Sermón del Monte es un ejemplo de la forma como debemos enseñar. ¡Cuántos esfuerzos no hizo Cristo para lograr que los misterios no fueran más misterios, sino verdades claras y sencillas! No hay nada impreciso en sus instrucciones, nada difícil de comprender.” –Testimonies, tomo 7, pág. 269.

b. ¿Por qué las parábolas desempeñaron una parte importante en la enseñanza de Cristo? Mateo 13:10–13.

“Jesús quiso incitar el espíritu de investigación. Trató de despertar a los descuidados, e imprimir la verdad en el corazón. La enseñanza en parábolas era popular, y suscitaba el respeto y la atención, no solamente de los judíos, sino de la gente de otras nacionalidades. No podía Él haber empleado un método de instrucción más eficaz. . . .

“Otra vez Cristo tenía verdades para presentar, que la gente no estaba preparada para aceptar, ni aun para entender. Por esta razón también Él les enseñó en parábolas. Relacionando sus enseñanzas con las escenas de la vida, la experiencia o la naturaleza, cautivaba su atención e impresionaba sus corazones.” –Palabras de Vida del Gran Maestro, pág. 11.


Lunes 29 de octubre

2. TEMAS PARA LA ENSEÑANZA

a. ¿Cuál fue el contenido de las enseñanzas de Cristo? Juan 1:17 (última parte); 8:32; 14:6.

“[El Salvador] no dijo nada para satisfacer la curiosidad o para gratificar las ambiciones de los hombres abriéndoles las puertas a las grandezas mundanas. . . .

“Cristo no trató de teorías abstractas, sino de aquello que es esencial para el desarrollo del carácter, aquello que aumenta la capacidad del hombre para conocer a Dios y amplía su eficiencia para lo bueno. Habló a los hombres de aquellas verdades que tienen que ver con la conducta de la vida y que abarcan la eternidad.” –Palabras de Vida del Gran Maestro, pág. 12, 13.

b. ¿Cuál es la gran verdad central de la Biblia, y qué prioridades se deberían establecer al preparar nuestras disertaciones? Juan 1:29; 12:32.

“La primera y más importante cosa es ablandar y subyugar al alma presentando a nuestro Señor Jesucristo como el Salvador que perdona los pecados. Nunca debería predicarse un sermón o darse alguna instrucción bíblica, sin señalar a los oyentes el ‘Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo’ (Juan 1:29). Toda doctrina verdadera hace de Cristo el centro, todo precepto recibe la fuerza de sus palabras. Mantened presente ante el pueblo la cruz del Calvario.” –Testimonies, tomo 6, págs. 53, 54.

“¿Se esforzarán nuestros ministros, mediante la oración ferviente, en tener la santa unción, para no introducir en su labor cosas sin importancia, que no son esenciales en este tiempo tan solemne? No lleven a sus labores ministeriales lo que se puede escuchar en cualquiera otra denominación religiosa. Mantengan siempre ante sus oyentes a un Salvador exaltado, con el fin de impedir que sus conversos se apeguen al hombre, y copien sus modales y sus métodos, en su conversación y conducta. El Señor tiene una variedad de obreros, que deben impresionar a la gente en diferentes aspectos. Ninguna congregación debe considerar perfectos los métodos de un hombre, para adoptarlos con exclusividad. Cristo es nuestro ejemplo.” –La Voz: Su Educación y Uso Correcto, pág. 344.


Martes 30 de octubre

3. LAS AYUDAS VISUALES E ILUSTRACIONES

a. ¿Qué clase de ilustraciones usaba Cristo, y por qué? Mateo 6:26–30; 13:3–9. ¿Qué deberíamos hacer si queremos seguir fielmente su ejemplo?

“Los ministros del evangelio de Cristo, que deben velar por las almas como quienes deben dar cuenta de ellas, estudiarán diligentemente las Escrituras, y doblarán a menudo sus rodillas para pedir la sabiduría celestial, a fin de poder saber cómo afirmar ‘las otras cosas que están para morir’ (Apocalipsis 3:2). Jesús dice: ‘Aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas’ (Mateo 11:29). Jesús fue el mayor Maestro que el mundo haya conocido. Presentó la verdad en declaraciones claras y convincentes, y las ilustraciones que usó fueron del más puro y elevado orden. Él nunca mezcló símbolos y figuras ordinarios con su instrucción divina, ni buscó fomentar la curiosidad o satisfacer la clase que le escuchaba solamente para distraerlos. No llevó la sagrada verdad hasta el nivel de lo común, y las ilustraciones cómicas que algunos ministros del evangelio usan nunca fueron proferidas por sus divinos labios. Cristo no empleó ilustraciones que crearan distracción e incitaran a la risa.” –The Review and Herald, 6 de agosto de 1895.

b. ¿Por qué Cristo eligió predicar la mayor parte del tiempo al aire libre? ¿Por qué deberíamos realizar más estudios y enseñanzas en contacto con la naturaleza? Salmo 19:1; Job 12:7–10.

“El Redentor del mundo. . . generalmente prefería dar sus discursos al aire libre. No había paredes que pudiesen contener la multitud que le seguía; pero tenía razones especiales por recurrir a los huertos y las playas a fin de dar allí sus instrucciones. Podía contemplar el panorama y hacer uso de objetos y escenas familiares para los de humilde condición, a fin de ilustrar con ellas las verdades importantes que les hacía conocer.” –Testimonies, tomo 2, pág. 579, 580.

“El libro de la naturaleza es un gran libro de texto, que debemos usar conjuntamente con las Escrituras para enseñar a los demás acerca del carácter de Dios y para guiar a las ovejas perdidas de vuelta al aprisco del Señor.” –Palabras de Vida del Gran Maestro, pág. 14.


Miércoles 31 de octubre

4. UN SALVADOR SENSIBLE

a. Compare la voz y los métodos de instrucción de Cristo con los de los fariseos. Mateo 22:15–22; Juan 7:37, 38.

“Cristo se dirigía a las inmensas muchedumbres que se agolpaban a su alrededor; y todos, sabios e ignorantes, podían comprender sus lecciones.” –The Review and Herald, 18 de mayo de 1897.

“Multitudes que no se interesaban en las arengas de los rabinos eran atraídas por su enseñanza. Podían comprender sus palabras, y sus corazones eran consolados y alentados. Hablaba de Dios, no como de un Juez vengador, sino como de un Padre tierno, y revelaba la imagen de Dios reflejada en sí mismo.” –El Deseado de Todas las Gentes, págs. 174, 175.

“La voz del Salvador era como música a los oídos de aquellos que habían estado acostumbrados a la prédica monótona y sin vida de los escribas y fariseos. Él hablaba lenta e impresionantemente, recalcando las palabras a las cuales deseaba que sus oyentes prestasen atención especial. Ancianos y jóvenes, ignorantes y sabios, todos podían comprender el pleno significado de sus palabras.” –Consejos para los Maestros, Padres y Alumnos, pág. 227.

“[Los que fueron enviados para arrestar a Jesús] le oyeron animar con tiernas y amorosas palabras al débil y al afligido; y también lo oyeron impugnar con autorizada voz el poderío de Satanás y ordenar la emancipación de sus cautivos. Escucharon los ministriles las palabras de sabiduría que derramaban sus labios, y, cautivados por ellas, no se atrevieron a echar mano de Él.” –Primeros Escritos, pág. 160.

b. Mientras Cristo predicaba a las multitudes, ¿cuán sensible era Él a las necesidades de las personas en la muchedumbre? Salmo 139:1–3; Mateo 9:36.

“Jesús vigilaba con profundo fervor los cambios que se veían en los rostros de sus oyentes. Los que expresaban interés y placer le causaban gran satisfacción.” –El Deseado de Todas las Gentes, pág. 220.

“Ni siquiera la muchedumbre que con tanta frecuencia seguía sus pasos era para Cristo una masa confusa de seres humanos. Hablaba y exhortaba en forma directa a cada mente, y se dirigía a cada corazón. Observaba los rostros de sus oyentes, notaba cuando se iluminaban, notaba la mirada rápida y de comprensión que revelaba el hecho de que la verdad había llegado al alma, y su corazón vibraba en respuesta con gozosa simpatía.” –La Educación, pág. 227.


Jueves 1º de noviembre

5. UN MODELO PARA LOS OBREROS CRISTIANOS

a. ¿Con qué resultados presentó Cristo la verdad a los diversos niveles educativos y económicos de la sociedad? Marcos 12:37 (última parte). ¿Cómo podemos seguir su ejemplo? Romanos 12:6–8 (primera parte).

“El mayor Maestro que el mundo haya conocido fue admirado por su sencillez; porque presentó la verdad divina de tal manera que incluso los niños podrían comprender sus palabras, y al mismo tiempo atrajo la atención de los mejores eruditos y más profundos pensadores del mundo. Mediante el uso de ilustraciones familiares simplificó la verdad para las mentes del pueblo común.” –The Youth’s Instructor, 4 de mayo de 1893.

“Cristo siempre usaba el lenguaje más sencillo; no obstante, sus palabras eran recibidas por pensadores profundos, y sin prejuicio; porque eran palabras que probaban la sabiduría de los oyentes. Las verdades espirituales, siempre deben presentarse en un idioma sencillo, aunque se dirijan a personas cultas; porque los tales son, por lo general, ignorantes de las cosas espirituales. El lenguaje más sencillo es el más elocuente. Es necesario dirigirse, tanto a los educados, como a los no educados, en la forma más sencilla y llana, para que la verdad pueda ser comprendida y encuentre recepción en el corazón.” –La Voz: Su Educación y Uso Correcto, pág. 94.

b. Reseñe el método que Cristo usó para alcanzar el corazón de un orgulloso dirigente religioso, pero sincero. Juan 3:1–17.


Viernes 2 de noviembre

PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL

1. Enumere puntos específicos que pueden ser aprendidos de los métodos de enseñanza de Cristo tal como están ejemplificados en el Sermón del Monte.

2. ¿Por qué es importante hacer de Cristo el centro de cada predicación?

3. ¿Cómo podemos estudiar regularmente a la naturaleza en relación con las Escrituras?

4. Al dar testimonio, enseñar o predicar, ¿cómo se puede estar seguro de estar imitando a Cristo y no a los fariseos?

5. Al enseñar a un grupo, ¿cómo podemos estar seguro de que estamos hablando directamente a cada mente y corazón?

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